JARDINERIA: La personalidad de las plantas

Reiko Uchida, la jardinera de las plantas de Los Jardines Botánicos de Palos Verdes me dice que su abuela tenía tanta confianza y amor a las plantas que lo mismo las regañaba que les cantaba canciones.

Mi amigo Juan Rodriguez, con quien solíamos conversar sobre jardinería, cuando diseñaba el periódico Impacto USA, contaba que su esposa solía impacientarse con la lentitud de la adaptación de las plantas.

—Aquí no se le ruega a nadie -decía mientras le daba un jalón a una planta caprichosa.

Mi amiga, Doña Lupe Chon, una valiente mujer sinaloense de Rosarito que tiene una amplia experiencia con las plantas conversaba conmigo el otro día y le comentaba cómo los agaves de mi jardín parecía que les había caído una plaga o acaso tenían exceso de agua.

Me aconsejó que los hiciera sufrir un poco, que los dejara un poco sedientos.

—¿Qué no ve cómo están acostumbrados a sobrevivir en el desierto?

Mis agaves entendieron el mensaje de Doña Lupe.

Jardines Botánicos de Palos Verdes, CA. Foto: José FUENTES-SALINAS

—José FUENTES-SALINAS, 0418.2018. Long Beach, CA

El chile, la cultura del sabor de los mexicanos en California

HABLEMOS pues de las delicias, ahora que la vida se ha hecho tan cara. Hablemos pues de cómo agradar al paladar y a la salud sin tanto costo. Busquemos a Tlatlahuaqui, diosa del chilito rojo, hermana de Tlaloc, para que nos dé un consejo.

Primera cosecha el chile piquín proveniente de la Casa de Don Antonio Arriola, de Zacapu, Michoacán, junto al agave suave. FOTO: José FUENTES-SALINAS.

Primera cosecha el chile piquín proveniente de la Casa de Don Antonio Arriola, de Zacapu, Michoacán, junto al agave suave. FOTO: José FUENTES-SALINAS.

“Díganos usted señora que cajita de semillas habremos de buscar. Díganos si habremos de probar primero la chillaca en rajas, o el poblano para rellenar. Díganos usted qué mata más el hambre y el aburrimiento, si es el cuaresmeño o el piquín. Díganos de esas mil quinientas variedades, dónde habremos de poner el habanero y el chiltepín, y si en la cueva de Coxcatlán también había frijoles y tortillas, díganos por favor”.

José FUENTES-SALINAS, tallerjfs@gmail.com